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jueves, 10 de mayo de 2012

Mi primera colcha.

Después de varios días intentando aprender cosas nuevas en mi faceta de bloguera tengo que admitir que tengo que buscar ayuda en terceros. . . Aún hay mucho que descubrir aquí y yo no sé donde más tocar, jeje.

Bueno pues para que vayáis viendo mis cositas os enseñaré mi primera colcha, como no de Suebonnet que me encanta...
Aun la tengo por acolchar y como en esto soy novata, la he dejado en la tienda donde estoy aprendiendo que te la acolchan con unas supermáquinas que tienen y quedan monísimas, aunque yo sigo insistiendole a mi profe que quiero aprender a acolchar que de momento solo he acolchado el guardabloques, que ya os enseñaré otro día.
Ya me direis, creo que para ser la primera no está mal...aunque debo de admitir que el marco de pieceo aún tiene mucho por mejorar, pero ya ireis viendo mis avances, estoy superorgullosa de ellos, creo que voy mejorando...

lunes, 7 de mayo de 2012

Comienza la aventura

Un día tal como hoy, día de la madre, no puedo comenzar mi andadura en esta aventura sin pensar en ella.
Es mi madre la que me ha transmitido desde pequeña, la curiosidad por el mundo de las labores. Nunca podré borrar de mi mente la imagen de mi madre pegada a su máquina de coser haciendonos a mi hermana y a mí toda nuestra ropa.. Y como no mis abuelas, con sus agujas en las manos en cuanto tenían un rato libre. Aún conservo un Jersey de lana que me hizo mi abuela Carmen cuando yo era una niña, para regalarmelo el día de Reyes y que yo descubrí un día que aparecí en su casa sin que me esperara cuando tejía tranquilamente. Cada vez que me lo pongo revivo ese momento.Y mi abuela María haciendo ganchillo hasta que sus facultades se lo han permitido. Y claro, como no, mi madrina que te hace unos zurcidos que te deja la ropa nueva. En fin que lo llevo en la sangre y es ahora cuando lo estoy desarrollando, aunque siempre he tenido algún que otro hilo entre manos. Así que os invito a que veais mis avances y como no a que me enseñeis, que tengo mucho que aprender aún y muchas ganas de descubrirlo todo.

Todo comenzó el verano pasado en casa de mis padres y pidiéndole fieltro a mi madre (que siempre tiene de todo lo que le pidas) y nunca imaginaría la cola que traería . . .